Según el reporte del tercer trimestre del INEC, la Población Económicamente Activa ubicó a 8.63 millones de personas con empleo. De este, apenas el 33.8% tiene un empleo adecuado, es decir, aquellos que cuentan con afiliación al seguro social y ganan a partir del sueldo básico. En comparación con el 2021, hubo una variación del 1.1%, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Empleo, Desempleo y Subempleo (Enenmdu).
En Ecuador, el trabajador promedio cuenta con un empleo adecuado, trabaja más de 40 horas a la semana y percibe el salario básico, el cual es de $425,00. Sin embargo, las diversas situaciones que ocurrieron durante el 2021, impactaron directamente en la economía de las empresas. En este sentido, Laborlex, consultora jurídica con más de 14 años en Ecuador, cuestiona al sector empresarial sobre si está listo para un incremento salarial en el 2023.
El incremento de sueldo, está dentro de las propuestas del actual presidente, Guillermo Lasso, quien indicó que año a año, incrementará $25 dólares más. Sin embargo, este cambio está sujeto a la inflación anual en el país.
Las relaciones laborales en el Ecuador cada vez son más complejas de manejar, cuando se habla de contratación laboral, y más aún cuando se trata sobre un incremento salarial. Si bien es cierto, Ecuador es el país con el salario básico más alto de Latinoamérica, pero con la legislación laboral menos flexible, sostiene, Velásquez. En este sentido, ¿es realmente un beneficio el incremento de sueldo para la reactivación económica en el país?
Los beneficios adicionales, se componen por: décimos tercero y cuarto, vacaciones y pago de utilidades. Además, este es un incremento prolongado, ya que mes a mes sube. El incremento salarial tiene un mayor impacto en las pequeñas y medianas empresas, las cuales deben tener un análisis general para entender el costo real de este incremento salarial, es decir, es de absoluta importancia saber cuál es el valor final a pagar a un trabajador porque quizás contratar no sea lo difícil, sino terminar la relación laboral, agrega Velásquez.
En este sentido, Laborlex recomienda considerar estos cambios e implementar un plan de acción, que permita garantizar la estabilidad económica durante el 2023.
Doménica Alarcón – MC Comunicaciones